Protección solar – ¿Pueden los bebés ir a la playa?
Con la llegada del buen tiempo, del sol, la playa, las piscinas…es momento de hablar de protección solar.
La pregunta siempre nos asalta.. ¿pueden ir los bebés a la playa?.. Habitualmente no es recomendable ir a la playa con bebés menores de seis meses, salvo a última hora del día para dar un paseo o a primera hora del día, antes de las 11 de la mañana.
Los lactantes son muy sensibles a la radiación solar y se queman con mucha facilidad. Además corren el riesgo de deshidratarse. Aún estando bajo una sombrilla la radiación se refleja hasta en un 30%.
Por otro lado, un bebé menor de 6 meses pasa la mayor parte del tiempo durmiendo y un entorno de arena y sol intenso, no es lo más recomendable para su descanso.
Escogiendo la crema de protección solar
Existen tres tipos de protectores solares que son: los filtros físico/minerales, los filtros químicos/orgánicos y los filtros mixtos (una mezcla de los anteriores).
Todos ellos deben cubrir frente a rayos UVA y UVB (estará especificado en el envase).
A los bebés menores de 6 meses tal y como hemos indicado, no deberían ir a la playa y por ello no deberías ponerles protector solar. Si van a la playa es preferible cubrirles la piel.
Para los bebés desde los 6 meses hasta los 3 años, lo indicado serían los protectores solares de filtros físicos/minerales. Estos filtros reflejan la radiación en la piel pero no penetran en ella, sino que rebotan. La pasta de que están hechos no es tan ligera por lo que extenderla costará más esfuerzo. Tampoco son tan resistentes al agua por lo que deberás ponerla muy a menudo. Son los más recomendables incluso para los bebés con dermatitis atópica.
Tengamos en cuenta que las cremas solares de protección solar, una vez abiertas duran 12 meses, con lo que cada año conviene renovarlas.
Conviene también cubrir la cabeza de nuestro bebé con un gorrito y si toleran las gafas de sol, será todavía mucho mejor. A pesar de que el bebé lleve ropa, hay que tener en cuenta que los rayos UV atraviesan la ropa por lo que la crema protectora siempre será necesaria.
No olvidemos ofrecer a los bebés agua con frecuencia aunque no la pidan para evitar la posible deshidratación. También es recomendable llevar algo de fruta fresca en trocitos dentro de una nevera portátil.
Evitar las horas de máximo calor que son desde las 11 de la mañana hasta las 18 horas.
